La pasión por la matemática emerge a flor de piel en la conversación con Marcelo Lanzilotta y Jorge Graneri, director y encargado la Comisión de Imagen –respectivamente- del Instituto de Matemática y Estadística “Rafael Laguardia” de la Facultad de Ingeniería, que está festejando sus 75 años. Anécdotas que van desde José Luis Massera hasta el propio rector de la Udelar, Roberto Markarian, ilustran la vida de un Instituto que es referencia en la matemática en Uruguay.


“Cuando en 1942 se creó este Instituto, era impensable que alguien se dedicara profesionalmente a las matemáticas. El IMERL supuso el puntapié inicial para la creación de la Escuela Matemática del Uruguay y es también uno de los institutos de matemática más antiguos de América Latina. El hecho de que esté inserto en una Facultad de Ingeniería y que realice tareas de enseñanza e investigación, supone un perfil singular con respecto a otros países”, señaló su director.

Matemática viva

Actualmente, el Instituto cuenta con más de 90 docentes, que están a cargo de los cursos de matemática que imparte la Facultad a nivel de grado y posgrado. “Varios ingenieros nos han planteado que la formación en matemática fue el diferencial que les brindó la carrera, porque les permitió desarrollar la capacidad de razonamiento, de organización y de profundización. Posiblemente el hecho de que las clases son dictadas por investigadores, que llevan vivo el espíritu de la matemática y que buscan provocar el razonamiento del estudiante, tenga que ver con ese diferencial obtenido”, agregó.

En efecto, el IMERL tiene entre sus filas al 60% de los investigadores PEDECIBA en el área de la matemática, lo que le permite realizar una importante tarea de investigación en temas como sistemas dinámicos, álgebra, lógica y probabilidad estadística. “Trabajamos en estrecha colaboración con otros institutos de Facultad y hemos colaborado con empresas públicas y privadas en el marco de diversos convenios”, indicó Graneri.

“La matemática tiene infinidad de aplicaciones que son muy importantes, pero es una disciplina que vale por sí misma. Hay cientos de ejemplos en los que la matemática se crea primero y muchos años después se aplica a la vida real, en ámbitos como la economía, la ingeniería o la física. Hay que seguirle echando leña a su fuego, para mantenerla viva”, coincidieron los docentes. También resaltaron la importancia de que “la matemática pura y la aplicada trabajen entrelazadas, se hagan preguntas y se respeten sus particularidades”.

Nivelando hacia arriba

“Cuando las bases no llegan firmes desde Secundaria, tenemos que ocuparnos de fortalecerlas y de ayudar a dar el salto hacia la Universidad”, señaló Lanzilotta. Con esa visión, además de dictar cursos en la Diplomatura en Matemática, que está destinada a docentes de Secundaria, desde el IMERL lideran distintas actividades que apuntan a mejorar el nivel en matemática de los estudiantes que ingresan a la Facultad de Ingeniería, como por ejemplo un ciclo de talleres que se realizó durante el primer semestre del año.

“Durante el segundo semestre del 2017, tenemos previsto programar un curso de nivelación en matemática que estará disponible para aquellos estudiantes que ingresen a la Facultad de Ingeniería en 2018 y que lo necesiten”, concluyó Lanzilotta.

De festejo

En el marco de los festejos por sus 75 años, el jueves 13 y viernes 14 de julio el IMERL realizará dos jornadas de intercambio que reunirán a destacados ingenieros y matemáticos de nuestro país. Además, se presentará un matasellos conmemorativo y se publicará en el matutino La Diaria un ciclo de columnas sobre la vida del Instituto.

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Foto 1: Rafael Laguardia dictando clase.

Foto 2: Jorge Graneri y Marcelo Lanzilotta